Gaviotas

     Esta mañana me encaminé al vertedero de Gomecello, cuanto más me acercaba más se cerraba la niebla, así que en vez de entrar directamente lo rodeé por el camino lo que bordea, vi un pequeño bandito de unas 200 gaviotas, entre sombrías y reidoras en la nueva explanación de la zona de acopios. No se veía nada más, así que me lo tomé con calma, no hice ni intención de sacar el telescopio de la mochila, en esos momentos me cruzó un milano real con una marca alar, al menos es lo que me pareció. Saqué la cámara y le hice la foto testimonial, ya se sabe, distancia, poca luz, mucha niebla, el resultado es eso, testimonial, pero se aprecia la marca alar del ala izquierda. La verdad es que cantaba bastante, creo que era verde y blanca, pero en el ala derecha no se si tenía, al menos no destacaba tanto. La presencia de unos galgueros impidió que pudiera dedicarle más tiempo y no pude cerciorarme.

Milano real con marca alar entre la niebla.

     Con calma entré en el vertedero, me paré un buen rato a charlar con los dos operarios de la entrada, en la creencia que el bando que había visto era el único de todo el vertedero. Cuando subí al vaso de rechazos, levanté un gran bando de gaviotas que descansaban allí, calculo que entre las distintas especies habría unas mil, que se fueron a descansar a un campo cercano.

Gaviotas levantándose del campo en el que descansaban.

     Como el vertedero se quedó vacío, la niebla se estaba levantando, no se oían demasiados disparos, y la mayoría de las parcelas estaban sin cosechar, me decidí a seguir el bando de gaviotas por las tierras cercanas. Un par de veces se levantaron, la mayoría ni siquiera por mi presencia, lo que me ha brindado la oportunidad de hacer algo de ejercicio matutino. He estado controlando todos los milanos que he visto, a ver si aparecía de nuevo el amigo etiquetado, pero no ha habido suerte. 

Milano real en vuelo.

     El paseo me ha permitido observar un bando de cigüeñas que descansaban bastante lejos, una de ellas por cierto era casi negra de la mierda que llevaba. En la parcela que hay al lado de la entrada del vertedero he encontrado 4 cigüeñas blancas, o lo que quedaba de ellas.

Restos de una cigüeña blanca.

     

     Volando, o más bien peleándose con los milanos, había dos aguiluchos laguneros, en la lejanía parecían hembras, aunque no descarto que fuesen jóvenes. Entre las gaviotas que había en los bandos, como es lógico la mayoría eran sombrías, vi dos anillas, una negra y otra azul, pero me fue imposible leerlas. Había un menor número de reidoras, y al menos una patiamarilla.

     Pensando que el tema no daba para más, recogí mis bártulos y me marché, pero justo al salir por la puerta me encontré un paisano realizando tareas agrícolas con el tractor y era perseguido por un pequeño bando de reidoras y algunas sombrías jóvenes. Le dediqué también un ratillo, aunque no pude ver ninguna anillada.

Tractor perseguido por las gaviotas.

Pareja de jóvenes reidoras.

     Así que aunque al principio de la mañana pensé titular la entrada "¿Dónde están nuestras gaviotas?", parece que ya tenemos unas cuantas, esperemos que el invierno siga avanzando y pronto empecemos las tareas de captura y marcaje.